Estábamos viendo televisión
Estábamos viendo televisión
y sonó el teléfono.
Lo dejamos sonar.
Ni siquiera hicimos el amague
de pararnos o preguntar
quién podía ser a esa hora.
De todas las cosas que hacíamos juntos
no contestar el teléfono
era la más precisa,
la que más nos gustaba.
Sentíamos que le decíamos al mundo
que no nos importaba,
porque teníamos entre las manos
lo único que realmente valía la pena.
y sonó el teléfono.
Lo dejamos sonar.
Ni siquiera hicimos el amague
de pararnos o preguntar
quién podía ser a esa hora.
De todas las cosas que hacíamos juntos
no contestar el teléfono
era la más precisa,
la que más nos gustaba.
Sentíamos que le decíamos al mundo
que no nos importaba,
porque teníamos entre las manos
lo único que realmente valía la pena.
4 Comments:
este me gustó bastante...
Ah! ponés el comment del que dice que le gusto bastante -alguien que no entiende nada pero nada de poesía- y no la justa apreciación sobre que este poema es una mala copia de losd e amor de Casas. Pensé que moderar comentarios era para filtrar boludeces, no para filtarar una apreciación justa que te es desfavorable. ¿Vos un rinoceronte? Sos un cagón. Me vengaré si puedo.
Estimado "uo que lee": En mi blog, yo modero lo que quiero. ¿Soy un cagón? Creo que no. Fijate que, a diferencia de vos, firmo siempre con mi nombre. Y la verdad, no creo que puedas vengarte de ninguna manera y tampoco creo que leas tanto. Saludos.
El control remoto...?
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