los diez consejos
Finalmente encontré los diez consejos de Ernest Hemingway para aquel que quiera hacer del escribir algo importante en su vida. Los venía buscando desde hace un tiempo sin mucha suerte.
Los leí por primera vez en francés y después los volví a ver en la revista de novedades de una librería. Los perdí de vista y pasaron más de cinco años. Hoy se me ocurrió buscarlos en el google pero en francés y ahí estaban.
No te van a hacer un escritor de la noche a la mañana, pero creo que sirven para pensar un poco qué se está haciendo bien y qué no y al final son buenos consejos.
Para Hemingway, aquel que quiera escribir debe:
1. Enamorarse.
2. Creer en uno mismo cuando se escribe.
3. Mirar el mundo.
4. Frecuentar a los escritores del barrio.
5. No perder el tiempo.
6. Escuchar música y mirar pintura.
7. Leer sin parar.
8. No buscar explicarse a uno mismo.
9. Seguir aquello que te da placer.
10. Callarse la boca.
El último es realmente útil. Por varias razones. Primero, me lo imagino a Ernest con barba y en París diciéndole a un pibe del barrio que lo va a visitar y lo quiere impresionar: “Nene, si sabés tanto, ¿por qué no te callás la boca, lo escribís y punto?”
Segundo, cuando uno se calla, por lo general los otros hablan y es ahí cuando se hace posible agarrar alguna historia, algún defecto, alguna postura. Y todo eso sirve más tarde en el escritorio.
Por último, muchísimos de los que dicen escribir, se la pasan hablando y hablando, creando infinitos discursos orales y, por supuesto, no escriben nada.
No sé ustedes, pero yo los veo todo el tiempo.
Los leí por primera vez en francés y después los volví a ver en la revista de novedades de una librería. Los perdí de vista y pasaron más de cinco años. Hoy se me ocurrió buscarlos en el google pero en francés y ahí estaban.
No te van a hacer un escritor de la noche a la mañana, pero creo que sirven para pensar un poco qué se está haciendo bien y qué no y al final son buenos consejos.
Para Hemingway, aquel que quiera escribir debe:
1. Enamorarse.
2. Creer en uno mismo cuando se escribe.
3. Mirar el mundo.
4. Frecuentar a los escritores del barrio.
5. No perder el tiempo.
6. Escuchar música y mirar pintura.
7. Leer sin parar.
8. No buscar explicarse a uno mismo.
9. Seguir aquello que te da placer.
10. Callarse la boca.
El último es realmente útil. Por varias razones. Primero, me lo imagino a Ernest con barba y en París diciéndole a un pibe del barrio que lo va a visitar y lo quiere impresionar: “Nene, si sabés tanto, ¿por qué no te callás la boca, lo escribís y punto?”
Segundo, cuando uno se calla, por lo general los otros hablan y es ahí cuando se hace posible agarrar alguna historia, algún defecto, alguna postura. Y todo eso sirve más tarde en el escritorio.
Por último, muchísimos de los que dicen escribir, se la pasan hablando y hablando, creando infinitos discursos orales y, por supuesto, no escriben nada.
No sé ustedes, pero yo los veo todo el tiempo.
posted by Terra at 3/15/2005 07:15:00 PM
7 Comments:
vamos a ver, entonces:
1. Enamorarse.
vale, conseguido. De hecho dos veces, pero esta vez es mucho más bonita, intensa y sincera. El mundo es extremadamente rosa y suave...esperemos que no se acabe!
2. Creer en uno mismo cuando se escribe.
Uhmmm esto se intenta. Hay veces que lo paso tan bien cuando escribo que no hace falta creer en mi. Como no hace falta creer en una silla, porqué está ahí.
Otras veces, cuando las cosas no van tan bien, uno no puede dejar de preguntarse cosas.
3. Mirar el mundo.
Adoro el mundo. Lo miro mucho. Esperemos que en un futuro él nos mire a nosotros.
4. Frecuentar a los escritores del barrio.
Vivo en Mataró (cerquita de Barcelona)...si tengo que echar un vistazo a los escritores de mi barrio, primero tendré que aprender árabe ;)
5. No perder el tiempo.
Vaya, aquí ya fallo. Pierdo mucho el tiempo, o al menos lo empleo navegando por millones de sitios y así se me escapa el tiempo. No creo que lo tire, simplemente lo pierdo.
6. Escuchar música y mirar pintura.
Ah, escucho música incesantemente, amo la música y no puedo vivir sin ella. Toqué la guitarra durante 6 años y creo que es uno de los mejores logros de la humanidad.
La pintura es otra genialidad, la cual adoro pero no practico por que soy lo peor. Eso sí, llevo la página web de una galería de arte de por aquí, así que veo bastantes pinturas y esculturas, sí señor.
7. Leer sin parar.
Otro bien. Leo mucho. No tanto como quisiera. No tantos clásicos como quisiera. Pero leo mucho.
Al que más, a Terry Pratchett. Os lo recomiendo, es mi genio y dios particular!
8. No buscar explicarse a uno mismo.
Ehmm aunque me considero bastante impulsivo, me gusta ser metódico y saber porqué hago las cosas y sus consecuencias, así que me restaré un punto...
9. Seguir aquello que te da placer.
www.meloncorp.com es un gran ejemplo de ello, no? Terranova es el otro gran ejemplo!
10. Callarse la boca.
...
Así que bastante bien, ves, esto me ha alegrado el día!!!
sigo pensando que eres el mejor escritor latinoamericano que existe...sigue ahí!
Juan, me he pasado un buen rato leyendo tu blog aunque tengo cosas pendientes que hacer. Pero ha valido la pena. Saludos.
""Por último, muchísimos de los que dicen escribir, se la pasan hablando y hablando, creando infinitos discursos orales y, por supuesto, no escriben nada.""
Para llenar este espacio vacío, se me ocurre que en el bestiario literario creo encontrar diferentes especies en diversos grados de evolución. El paisaje casi se puede pintar como una especie de país con un tipo bastante peculiar de gobierno. Las partes de éste comprenden a los autores (que también son lectores y forman el gobierno), los editores (críticos asalariados y porteros al gobierno), lectores y críticos en general (el pueblo), etc. A éstas especies, cierto darwinismo también les aplica. Una parte de esos del pueblo aspiran a llegar al gobierno. Se esmeran; pocos convencen a los porteros. Algunos de esos siguen intentando. Los que se frustran pero siguen tratando de acercarse tratan de conseguir trabajo de porteros. Los que no lo consiguen se convierten en criticones impertinentes que no llegan a producir más que eso: críticas. --Quizás lo que Juan describe sean éstos.-- Mientras tanto, el resto del pueblo lee y digiere lo que viene de arriba. El resultado es inmortalidad o el olvido. Éste último es el que jubila a los gobernantes.
Luis
Varios consejos
Ernest Hemingway
Escribe frases breves. Comienza siempre con una oración corta. Utiliza un inglés vigoroso.
Sé positivo, no negativo.
La jerga que adoptes debe ser reciente, de lo contrario no sirve.
Evita el uso de adjetivos, especialmente los extravagantes como "espléndido, grande, magnífico, suntuoso".
Nadie que tenga un cierto ingenio, que sienta y escriba con sinceridad acerca de las cosas que desea decir, puede escribir mal si se atiene a estas reglas.
Para escribir me retrotraigo a la antigua desolación del cuarto de hotel en el que empecé a escribir. Dile a todo el mundo que vives en un hotel y hospédate en otro. Cuando te localicen, múdate al campo. Cuando te localicen en el campo, múdate a otra parte.
Trabaja todo el día hasta que estés tan agotado que todo el ejercicio que puedas enfrentar sea leer los diarios. Entonces come, juega tenis, nada, o realiza alguna labor que te atonte sólo para mantener tu intestino en movimiento, y al día siguiente vuelve a escribir.
Los escritores deberían trabajar solos. Deberían verse sólo una vez terminadas sus obras, y aun entonces, no con demasiada frecuencia. Si no, se vuelven como los escritores de Nueva York. Como lombrices de tierra dentro de una botella, tratando de nutrirse a partir del contacto entre ellos y de la botella. A veces la botella tiene forma artística, a veces económica, a veces económico-religiosa. Pero una vez que están en la botella, se quedan allí. Se sienten solos afuera de la botella. No quieren sentirse solos. Les da miedo estar solos en sus creencias...
A veces, cuando me resulta difícil escribir, leo mis propios libros para levantarme el ánimo, y después recuerdo que siempre me resultó difícil y a veces casi imposible escribirlos.
Un escritor, si sirve para algo, no describe. Inventa o construye a partir del conocimiento personal o impersonal.
Tengo una pregunta para Ariel Bermani. ¿La novela "Mercado" que está en la red, es la que presentó en el Concurso Cortazar tal cual? Temo que lo que haya leído en la red esté incompleto o en estado embrionario ¿es así o es adrede? ¿Hacia dónde corren "todos" . . . ?
Por otro lado, Hemingway sólo uno entretantos tipos de escritores llenos de buenos concejos, pero cuando James dice "exquisito" o "delicado", todo se vuelve evanescente y pleno de levedad, ambigüedad y potencialidad. Son distintas sensibilidades, otras voces otros ámbitos. Thomas Mann, sin dar concejos y recetas facilistas, opina que la novela debe llevar la marca de lo extremo.
Un saludo a todos los "laburantes" de la escritura creativa.
En efecto, la versión de "Mercado" que está en la red es anterior, embrionaria y no la leo más para no amargarme. De ahí salió una novela corta -70 páginas- que sacó un premio chiquito el año pasado.
Un abrazo,
Bermani
Muchas gracias por este posteo, son muy utiles.
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